¡¡AFRICA!!
Dicen que África es imprevisible. La verdad que lo es y en temporada de lluvias se puede volver tan traicionera como para poder truncar todos tus planes, volver con una cura de humildad o pensar no volver jamás. Ese es lo que nos paso esa noche de pesadilla de camino al PN. Lugandwa.
Todo parecía bajo control. Mañana soleada, con buena temperatura, carretera más o menos en buenas condiciones el Unimog rodando como un reloj. LLegamos a la localidad de Petauke, donde repostamos para empezar la aventura. Tomamos la pista que nos lleva hacia el norte, al poblado de Sandwe. Pista que según la cartografía Michelin y la Raise no es una pista secundaria sino una principal. Los 70 kilometros que separan Petauke de Sandwe los recorremos de una manera lenta y tranquila, pues la pista es algo angosta, con piedras y un poco encajonada. Nos lleva mas de cuatro horas en cubrir la distancia. Al llegar a Sandwe preguntamos a un lugareño como continua el camino desde allí hasta el campamento Scout en Nyamaluya. Su respuesta no pudo ser mas clara " en esta época del año esa pista es intransitable, ahora bien, lleva cuatro dias sin llover, encontraréis mucho barro pero a lo mejor podréis llegar al campamento". Basta que nos digan que a lo mejor podemos llegar al campamento para tomarnoslo casi como un desafío. ¡¡que ignorantes, en insensatos...Africa es imprevisible!!!!!!
Enfilamos la pista, muy seguros, sabiendo que con un Unimog hay pocas cosas terrestres que nos puedan detener. Empiezan a llegar los problemas y las zonas húmedas, blandas y complicadas. La verdad que el Unimog es un auténtico tanque. Se iba defendiendo de las pequeñas trampas, hasta que a medida que íbamos penetrando mas y mas en nuestro recorrido, ya no le sobraba tanto a la máquina. Empezamos a circular con el 4x4 constantemente y de ahí a los bloqueos del diferencial de ambos ejes casi también de una manera constante. En el viaje a Sudamerica solo use los bloqueos en dos ocasiones, el el salar de Uyuni, cuando me quedé atascado por dos días y en Otabalo, Colombia, cuando calló tal tormenta que nos quedamos atrapados en una pista de montaña. ...Pero esto es África!!. Al Uni le cuesta cada vez más avanzar, la pista esta tan blanda, que se hunde constantemente hasta llegar un momento que se nos hunde de un lado y ya no es posible continuar. Afortunadamente había un talud en el lado derecho, que nos paró el vuelco. Tuvimos también la suerte que nos ocurriera cerca de un poblado, que rápidamente se revolucionó y acudió en nuestra ayuda sin dilación. A los dos minutos teniamos allí a 6 jovenes dispuesto a darlo todo por sacarnos. Así que entre ellos, Jorge, Luis, y el winch tan potente que llevamos en el morro, pudimos sacar el Uni despues de una hora de trabajo. Tuvimos luego que celebrarlo con unas cervezas y una propina. Estaba ya casi anocheciendo y todavía nos quedaban 45 kilometros para llegar al campamento. ...pero la fiesta no había hecho más que comenzar .Empezaron los vadeos de un metro, mas barro, los nervios y el ultimo vadeo....dos metros de profundidad. Veíamos que nos llevaba la corriente. el unimog tiraba de motor como un salvaje, pero nosotros veíamos que el nivel del agua cubría primeramente el parachoques, luego las ruedas y cuando nos quisimos dar cuenta el agua llegaba al parabrisas. Fueron unos momentos de tensión y de rezar porque no se sumergiera mas. Yo ya dudaba si estábamos rozando los limetas del vehículo. Despues de recorrer mas de 100 metros en esas circunstancias, llegamos a la otra orilla. Casi se nos para el corazón a los tres despues de la experiencia, pero ahí seguía el Unimog, con el motor en funcionamiento. Gracias a su diseño, sus ejes portantes, el snorque, l pudimos salir de semejante trampa. Mis amigos me decián.."si no lo veo no lo creo....es increíble de donde nos ha sacado el aparato".
Pero lo peor de todo es que habíamos pasado lo que en aviación se llama el PNR o punto de no retorno. Inviable e impensable volver de nuevo sobre nuestros pasos. Ya no nos quedaba más que continuar y rezar que no hubiese más vadeos similares delante de nosotros y que por Dios!!! que no lloviera!!!! ...pues Dios no se acordó mucho de nosotros o si, porque empezó a llover de una manera ya descontrolada. Ya había caído la noche y intentábamos llegar al campamento fuera como fuese en medio de aquel laberinto. Pero un árbol caído en medio de la pista, nos obligó a tener que abrir una ruta paralela en medio de los cañaverales y el bambú. Tardamos más de dos horas en bypasear el árbol. y despues de ese, otro y luego otro...nos fallaban las fuerzas y la moral cada vez se mellaba más. El agua arreciaba con fuerza y la pista llego un momento en que apenas se distinguía del agua que caía. Por mi cabeza ya solo pasaba una idea. Si para atrás no se puede volver y para delante se pone a llover por una semana como, como viene siendo habitual en esta época del año, nos toca dejar aquí el Uni hasta que venga la estación seca.
Llegamos de nuevo en medio de la noche a a otro río que pudimos vadear sin mucha dificultad pero lo que no pudimos fue remontar la margen del otro lado. El Unimog fue incapaz de trepar por la empinada pista con el barrizal que se había formado. Estábamos con la ruedas metidas en el río, sin posibilidad de remontar el talud que nos llevaba a la orilla y viendo como el nivel del río subía a marchas forzadas debido al aguacero que nos estaba cayendo. Decidimos dar la vuelta, volver a vadear el río y buscar un lugar seguro. Un poblado que habíamos pasado hacia un kilometro iba a ser nuestro motel improvisado. Así que a las tres de la mañana allí terminamos al lado de una choza, agotados y en mi cabeza solo una idea. El Unimog se queda aquí hasta la temporada seca!!
A las cuatro y media de la mañana el poblado empeza a despertar. Fuimos enseguida la atracción de feria del día. Nos habíamos acostado a las tres, pero se merecían que bajara a hablar con ellos, al fin y al cabo, hemos sido nosotros los que nos hemos tomado la libertad de pernoctar en su territorio sin ningún tipo de permiso.
Yo no había dormido nada, pensando en como planear la vuelta a casa, como dejar allí el vehículo de la forma más segura posible, en como conseguir los días para volver en la estación seca a por el y la enorme putada que les iba a hacer a mis compañeros de viaje,...pero no siempre se gana y hay que aceptar las derrotas y la nuestra era contundente.
Me bajé a hablar con ellos y la amabilidad y el cariño con el que me tratataron fue alucinante. Me dijeron que no me preocupase, que no iba a llover ese mismo día y que prepararían una cuadrilla de jovenes con azadones para acompañarnos abriendo el camino hasta una zona ya segura. Así que despues de oír tan grata noticia, les pedi permiso para volver a la cama de nuevo, porque no era persona.
Esta vez si dormí con la mente tranquila, hasta las siete, que oí sus voces de "Mzungu, Unimog...Mzungu Unimog" que viene a significar, " hombre blanco del Unimog....... " ahí estaba ya la cuadrilla preparada, cuatro jovenes con azadas listos para la batalla.
Vadeamos de nuevo el río y dejaron la empinada subida como una autopista. Efectivamente sus previsiones meteorológicas fueron correctas. El sol empezó a brillar con fuerza y los caminos comenzaron a orearse a marchas forzadas. Un vez superado este paso del río, nos fuimos todos en el Unimog al siguiente paso, un puente de piedra que se había llevado la corriente. Piedra a piedra fueron reconstruyendo el puente , para por fin afrontar la última prueba que nos llevaría al campamento Scout. Despues del trabajo bien hecho, una cerveza para celebrarlo entre todos y sus honorarios 10US$ por barba. Un precio justo teniendo en cuenta que se tenían que volver casi 7 kilometros andando al poblado.
Del campamento Scout al Tundwe River Lodge la cosa mejoró pero tampoco para tirar cohetes. Nos volvimos a quedar atollados de nuevo en otro paso. Esta vez si nos sacó el Winch sin ninguna dificultad. Ya caía la noche y llegamos a nuestro objetivo, el pueblo de Mfuwe. Todo el día para andar 40 kilometros, pero al menos hemos llegado a algo medianamente civilizado. Yo ya con la mente tranquila sabiendo que el Unimog de momento no se quedaba en África, porque a puntito hemos estado de dejarlo una temporadita.
El día siguiente, desde el Croc village camp site, lo dedicamos a hacer las tareas de mantenimiento que se requieren cuando se ha sometido al vehículo a tanto esfuerzo y vadeos. Lo primero que vemos es que se nos ha ido un reten de la rueda delantera derecha. Afortunadamente lo llevábamos de repuesto, así que se cambió allí mismo. Lo segundo fue cambiar todos los aceites de transmisión del camión. Tiene un total de 8 depositos con una capacidad total de 10 litros. Mandamos a un empleado del camping al pueblo a comprar SAE 90 de engranajes para poder realizar la tarea.Entre unas cosas y otras echamos todo el día en poner el camión listo para nuestro siguiente objetivo. El parque nacional South Luangwa.
Este parque es el mas importante y visitado de Zambia. Dicen que se pueden ver en el los 5 grandes. Tiene un pequeño y ya repetido problema, en épocas de lluvias se vuelve casi intransitable. Nuestra idea original era atravesar el parque de sur a norte a través de la puerta Chifungwe y enlazar desde allí con la carretera principal N2 que nos llevaría a la frontera con Tanzania. Nos advierten que esa ruta esta impracticable y que es una locura intentarla. A la vista de la reciente experiencia sufrida dias atrás decidimos ni tan siquiera intentar semejante hazaña. Ya hemos tenido suficiente! Esto nos va a llevar a dar un drástico cambio al viaje. Para salir del país o vuelves por Lusaka dando un rodeo de 1500 kilometros o entramos en Malaui para desde allí pasar a Tanzania.
Visitamos el parque por las pistas principales. Un parque muy bonito y muy caro. Dormir dentro de alguno de sus lodges cuesta la friolera de 500US$ americanos por persona. Esta claro para quien esta orientado este tipo de turismo. Americano de alto poder adquisitivo. Se los veía transitar en los Toyotas descapotados del Lodge, o almorzando con cocineros privados en medio del parque. Nosotros solo pudimos ver como parte adicional de nuestra colección de animales, uno de los 5 grandes, el búfalo. Despues de recorrer los PN de Botswana, Namibia, Sudafrica, Zimbabwe,Zambia...ya me parecen casi todos iguales....
LA decisión esta tomada, nos vamos por Malaui. Tenemos un ligero problema. No hay combustible en Malaui así que llenaremos a tope nuestros tanques en la ciudad fronteriza de Chipata, para atravesar Malaui y llegar a Tanzania sin repostar.
Otra cosa curiosa que hemos vivido estos últimos día en Zambia ha sido la Copa Africana de Futbol. Mira por donde esta noche se ha proclamado Zambia ganadora por penaltis a Costa de Marfil. Es la primera vez que Zambia gana la copa Africana y el país es una auténtica locura. Es una fiesta absoluta!!! Aunque a mi personalmente no me gusta el fútbol, tengo que reconocer que abre muchas puertas y más si eres español, con eso de ganar la eurocopa y el mundial.
Zambia nos ha dejado un excelente recuerdo de sus gentes. Es un país de unos paisajes y riquezas increíbles que poco a poco tiene que ir despertanto al desarrollo y a la inversión. La empresa turística puede que sea en un futuro una de las soluciones a su subdesarrollo. Es un país aunque con muchas carencias te hace sentir muy cómodo, que al fin y al cabo es lo más importante, porque a lo otro te adaptas.
Notas de viaje: